(Del libro "Luz sobre el yoga") de BKS IYENGAR
Los ocho miembros del yoga aparecen
descritos en el capítulo II ó Sadhana Pada de los Yogasutras de Patañjali.
Son:
1- YAMA (mandamientos morales universales)
· Ahimsa: no
violencia
· Satya: verdad
· Asteya: no apropiarse de lo ajeno (robar)
·
Brahmacharya: continencia
· Aparigarha: no codiciar
2- NIYAMA
(autopurificación por la disciplina individual)
· Saucha: limpieza
·
Santosa: contento
· Tapas: austeridad
· Svadyaya: estudio del
sí-mismo
· Ishvara pranidhana: abandono de todas las acciones a
Dios
3- ASANA (posturas)
4- PRANAYAMA (respiración)
5-
PRATHYAHARA (poner la mente y los sentidos bajo control)
6- DHARANA (
concentración en un solo punto o total atención en lo que se está haciendo
mientras la mente permanece inmóvil e imperturbable)
7- DHYANA (cuando la
inteligencia está inmóvil y se relajan las tensiones, podemos experimentar
dhyana)
8- SAMADHI (estado de superconciencia producido por la meditación
en que se da la unidad con el espíritu universal)
1- YAMA:
- Constituyen reglas morales para la sociedad y para el individuo. Su no cumplimiento se debe a emociones como la codicia, el deseo y el apego que pueden ser leves medianas o excesivas y solo traen dolor e ignorancia.
1- AHIMSA: NO VIOLENCIA, NO MATAR
En su
sentido más amplio significa AMOR, que abarca toda la creación. El hombre mata
para alimentarse o protegerse de algún peligro. La violencia es un estado de una
mente miedosa, débil, agitada o ignorante; por ello el hombre ha de confiar en
que Dios le protege para no temer ningún mal y aprender a basar su fe en la
realidad y la investigación.
El yogui/ yoguini cree que ha nacido para ayudar
a los demás. Sabe que su vida se halla ligada a la de los otros, antepone la
felicidad ajena a la propia y se convierte en fuente de alegría para todo aquel
con el que convive. Incluso si se trata de un malhechor, le ayudará a combatir
su mal.
Acompañan a ahimsa:
· Abhaya (ausencia de temor): purificado
mediante el estudio del sí-mismo, el yogui no teme a nadie.
· y akroda
(ausencia de ira): la ira puede llevar a la degradación de la mente o al
crecimiento espiritual. El yogui se enoja consigo mismo si su mente se hunde o
si sus conocimientos y sus experiencias no evitan un desatino. En cambio ha de
ser considerado con los defectos ajenos mientras que firme con los
propios.
2- SATYA: VERDAD
Presupone una perfecta veracidad de
pensamiento, palabra y obra. La realidad es en esencia amor y verdad y se
expresa a través de estos dos aspectos.
Cuatro son las formas de pecado mediante
la palabra:
- la injuria y la obscenidad
- la falsedad en
transacciones
- la calumnia o el chismorreo
- ridiculizar lo que otros
consideran sagrado para ellos
El control de la palabra arranca de raíz toda
malicia y proporciona auto-control.
Quien está establecido en la verdad
obtiene el friuto de sus acciones sin aparentemente hacer nada. Dios, fuente de
toda verdad provee sus necesidades y cuida de su bienestar.
3- ASTEYA: NO
APROPIARSE DE LO AJENO (ROBAR)
Incluye también no usar algo para un propósito
diferente al pretendido o por más tiempo del permitido por su propietario. El
yogui reduce sus necesidades físicas al mínimo. Mientras que a otros les apetece
la riqueza, el poder, la fama o el goce, al yogui solo le apetece adorar a Dios
ya que las apetencias enturbian la serenidad.
4- BRAHMACHARYA: VIDA DE
CELIBATO, CONTINENCIA, ESTUDIO RELIGIOSO
Es un brahmachari aquel que en todo
ve la divinidad y que se dedica al estudio de los Vedas, absorto en Brahman.
Patañjali hace hincapié en la continencia de cuerpo, palabra y pensamiento,
aunque brahmacharya poco tiene que ver con ser soltero o casado. Todos los
smrtis (códigos de ley) recomiendan el matrimonio. No es posible conocer el amor
divino sin experimentar la felicidad y el amor humano.
Brahmacharya
desarrolla un caudal de vitalidad y energía, una mente valerosa y un poderoso
intelecto que le permiten hacer frente a toda injusticia.. el brahmachari
utilizará sabiamente todas las fuerzas que genera: empleará las físicas en el
servicio del Señor, las mentales para la propagación de la cultura y las
intelectuales en el fomento de la vida espiritual.
5- APARIGRAHA: NO
CODICIAR, NO ACAPARAR
No se debe de acaparar las cosas que no nos son útiles.
Es pobre de espíritu quien obtiene sus bienes sin trabajar o por medio de
favores de los demás. El acaparamiento indica falta de fe en Dios y en sí mismo
para su abastecimiento. Asimismo, el yogui entrena su mente para que no sienta
la pérdida o la falta de algo y se siente satisfecho/a con lo que le sucede,
entonces, todo aquello que necesita le viene dado en el momento
oportuno.
2- NIYAMA:
- Normas de conducta que se refieren a la disciplina individual
1- SAUCHA:
LIMPIEZA, PURIFICACIÓN
El baño limpia externamente. Asana y pranayama limpian
internamente nuestro cuerpo y mente.
- asana: tonifica el cuerpo y expulsa
las toxinas
- pranayama: limpia y airea los pulmones, oxigena la sangre,
purifica los nervios
La mente también se ha de purificar mediante bhakti de
emociones como el odio, la rabia, la pasión, la lujuria, la avaricia, el engaño
y el orgullo.
El intelecto (buddhi) se purifica mediante svadyaya.. Esta
depuración interior proporciona fulgor y gozo; nos trae benevolencia al tiempo
que aleja el dolor mental, el abatimiento, la pena y la desesperación. Cuando la
mente está lúcida, resulta fácil volverla unidireccional (ekagra).
Los medios
mediante los cuales nos procuramos el sustento han de ser puros. El alimento
debe ser tomado con la sensación de que con cada bocado adquirimos fuerzas para
servir a Dios. El alimento ha de tomarse con el fin de favorecer la salud, la
fuerza, la energía y la vida y deberá ser sencillo, nutritivo, jugoso y
reconfortante. Con el transcurso del tiempo el/la practicante de yoga ha de
adoptar una dieta vegetariana afín de obtener atención uni-direccional y
evolución espiritual. El carácter se moldea según el tipo de alimentos que
tomamos. El yogui que cree en la armonía come tan solo para atender a su
sustento, ni mucho, ni poco.
Para las prácticas espirituales es también
importante la limpieza del lugar en el que las realizamos.
2- SANTOSHA:
CONTENTO O SATISFACCIÓN PLENA.
Una mente descontenta no puede concentrarse.
El yogui, al no sentir falta de nada, se halla satisfecho de forma natural y
esta satisfacción le proporciona una dicha sin par pues cumple con su
deber.
3- TAPAS: RESPLANDECER, ARDER, BRILLAR, SUFRIR DOLOR O CONSUMIRSE
POR EL FUEGO.
Indica un ardiente esfuerzo en todas las circunstancias con el
objetivo de de lograr una meta determinada en la vida que unirse con la
divinidad. Comporta autopurificación, disciplina y austeridad.
Mediante tapas
el yogui desarrolla fortaleza de cuerpo, mente y carácter, y adquiere valor,
sabiduría, integridad, rectitud y sencillez.
Tipos de tapas:
a- kayika: se
refiere al cuerpo. Son: ahimsa y brahmacharya
b- vachika: se refiere a la
palabra. Son: no ofender, cantar a Dios, decir la verdad y no hablar mal de los
demás.
c- manasika: se refiere a la mente. Es el desarrollo de una actitud
mental serena y equilibrada en medio de alegrías y pesares sin perder el
auto-control.
4- SVADYAYA: ESTUDIO DEL SÍ-MISMO.
La educación consiste
en la extracción de lo mejor que hay dentro de la persona.
Quien practica
svadyaya empieza a comprender que toda la creación tiene por cometido bhakti (la
adoración), y no bhoga (el goce), que toda creación es divina y que la divinidad
reside en su interior y que la energía que lo mueve es la misma que mueve el
universo entero.
Mediante svadyaya, el sadhaka comprende la naturaleza de su
alma y alcanza la comunión con lo divino. Absorbe enseñanzas de otras culturas y
las añade a la suya propia.
5- ISHVARA PRANIDHANA: Es la dedicación al
señor de nuestras acciones y nuestra voluntad. Quien tiene fe en Dios no se
desespera. La adicción a los placeres destruye tanto el poder como la gloria. De
la satisfacción de los sentidos cuando éstos van en pos del placer surge moha
(el apego) y lobha (la codicia) para su repetición. Si no se os complace se
produce soka (la tristeza). Han de refrenarse pues mediante el conocimiento y el
dominio del sí-mismo. Esto empieza en bhakti . el sadhaka ora: “Desconozco lo
que es bueno para mi. Hágase tu voluntad”. En bhakti no hay lugar para el “yo” y
“lo mío”. Cuando desaparecen los sentimientos del “yo” y “lo mío” es que el alma
individual ha completado su crecimiento. Las acciones reflejan la personalidad
de un hombre (o mujer) mejor que sus palabras.